viernes, 4 de diciembre de 2009

Bicho raro, bicho enamorado.


Hoy me he despedido sin decir adiós. Y me he dado cuenta de que es la despedida más triste posible.
Y no es que alguna vez me haya preguntado cuál debía ser la despedida más triste. Es que es una de esas preguntas que guardamos tan adentro que muy pocas veces alcanzamos a leer, o incluso pudiendo, nos cegamos a nosotros mismos con tal de no averiguar tan temida respuesta.

Miedo, tristeza, felicidad, amor. La vida tiene tantos sabores, tiene esas mezclas tan extrañas, que "¡oh dios!", puedes darle un bocado al chocolate más amargo y que en tu boca se derrita la mejor de las vainillas, porque como he dicho: hoy me he despedido sin decir adiós, y de nuevo, la vida, me ha ofrecido un hola.

2 comentarios:

  1. Comentaré de nuevo el primero para decir, que sí, pude que esté loco, que puedes llamarme bicho raro Edu jajajaja Pero señoras y señores, es Claire. Y a mí, por ahora, con un no..., con un no me mata. :P A dormir tan feliz que me voy xD

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  2. HUGACHO!!!! a buenas oras leo esto!!! ¬¬

    pero no te derrumbes!! los desamores siempre son muy dolorosos...

    ye veras... esto es un etapa... al final se supera!!! ^^

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Comentarios